Jueves de citas #39

Esta es una sección en la que les voy a poner todas las citas que saco de algún libro en especifico. Tengo la manía de copiar todas las frases que me gustan, que me llegan que me hacen sentirme bien. 

Esta semana decidí ponerles las citas de:

Citas:

Yo no creo que haya un momento o unas condiciones para querer a una persona. Quizás por eso estoy lleno de cicatrices.

En los tiempos en que estamos, importa mas el contrato matrimonial que la boda en si, el entierro mas que el muerto y la vestimenta mas que la persona. 

Yo me dejo guiar por algo mucho mas valioso: el corazón. 

Y otra cosa que me da mucha rabia es el motivo de por que los muertos reciben mas flores que los vivos, ¿es que el remordimiento es mas grande que la gratitud? 

No es mas rico el que mas tiene sino el que menos necesita. 

¿Es que ahora no vivimos como esclavos también por una miseria? ¿No vivimos como esclavos para tener cosas que de verdad no necesitamos? ¿Para tener cosas que lo único que nos hacen es separarnos de la gente? Consolas, televisiones, aparatos de gimnasia, teléfonos de ultima generación… Todo, todas estas cosas nos encierran en las casas, dejando a un lado los cafés con los amigos, las cervezas después de una buena pachanga de fútbol (ahora los partidos entre los amigos se jugaban en el salón de cada uno, con el mando de la consola en la mano y el cubata encima de la mesa), los paseos por el campo. 

Yo creo que una pareja debe aceptar los defectos del otro; nadie es perfecto, eso deberíamos saberlo por experiencia propia.

– No creo que baste una sola noche contigo para llegar a conocerte. 

- Ah, ¿no? ¿Y cuanto tiempo crees que necesitarías? 

- ¿Contigo? Una vida entera.

Esa casa hipotecada, como mínimo, debería tener tres habitaciones. Una para papa y mama, y las otras para la parejita de niños que pensaban tener, niños que, por supuesto, deberán ir a los mejores colegios de la zona y a todas las actividades extraescolares posibles que pudieran en la tarde: ballet, esgrima, francés…, a todas. No importaba que el niño se estresara con tanto movimiento. Merecía la pena cuando a la hora de las barbacoas los llamabas delante de tus amigos o amigas, para que te hicieran una muestra de un lanzamiento de rugby o un plie, releve o como demonios se digan los pases de baile. Los amigos fingirán un “oooh…” de sorpresa, y el padre o la madre aprovecharían para contar todo lo demás que estaba empezando a aprender. ¿A cambio de que? A cambio de la perdida de la infancia de ese niño. Sin poder jugar a nada. ¿Y sabes que es lo peor? Que todo eso es a cambio de horas extras en el trabajo, por parte de los padres, para poder pagar todo eso. Horas que se perdían en poder estar junto a sus hijos para crear vínculos familiares. 

Siempre me ha fascinado la idea de abrir las alas y dejar todo atrás, poder comenzar de cero desde otro lugar. 

Yo solo te puedo dar un consejo, y es que no se debe temer al pasado. Lo pasado, pasado es, y no se puede hacer nada con el. Pero lo que si puedes elegir es tu presente. 

A veces es mejor sentirse como un niño toda la vida. Duelen menos unas rodillas raspadas que un corazón roto. 

Las grandes almas tienen voluntades, las débiles, solo deseos

¿Leyeron el libro? ¿Cual es la frase que mas les gusto?

Saludos de tinta!!